En el yoga tradicional, el cuerpo no se entiende solo desde la anatomía física, sino como un microcosmos en el que fluyen energías, ciclos y ritmos que reflejan el universo. Sin embargo, en el yoga moderno, esta visión ha sido desplazada por una perspectiva biomédica, transformando la práctica y su propósito.
Explorar el cuerpo desde la mirada del Hatha Yoga antiguo y la Medicina Tradicional China nos permite reconectar con su dimensión sutil: los canales energéticos, la respiración, la alineación interna y el equilibrio natural entre esfuerzo y relajación.
Nada se fuerza, todo se alinea. La práctica de Yogasana que te propongo sigue estos principios universales aplicados al movimiento:
- Alineamiento desde el cuerpo energético interno
- Enraizamiento y uso de la gravedad
- Relajación o no-hacer del cuerpo físico
- Atención en el centro de gravedad
- Respiración consciente
- Atención plena
Estas pautas nos conectan con el “movimiento natural”, un movimiento fluido, armónico y sin esfuerzo, lejos de la tensión o la ambición.
Mi recorrido en Yogasana:
Durante más de 20 años he practicado y enseñado Ashtanga Vinyasa Yoga (combinado con alineamiento Iyengar) y Vinyasa Krama (TKM Desikachar). Mi camino cambió radicalmente cuando conocí a Dona Holleman y su enfoque “Centered Yoga”, que profundizó mi comprensión del movimiento. Más tarde, en el sur de India, con Rekha Tandon, exploré cómo estos mismos principios se aplican en la danza clásica india.
Mi experiencia se ha ido enriqueciendo con los años, y ahora comparto estos principios universales del movimiento en mis clases y cursos, tanto online como presenciales. Si deseas aprender conmigo, no dudes en contactarme.
